Vargasllosiana (3): Semilleros
La obra de Mario Vargas Llosa es prolífica en novelas de gran ambición, pero llama la atención la discreta representación que, vista desde el amplio conjunto de su obra, dedica al cultivo de la narrativa breve. Esta curiosa evidencia resulta todavía más llamativa si se tiene en cuenta que la obra con la que el "escribidor" debutó en el mundo literario era una colección de relatos titulada Los jefes , y que gran parte de la producción literaria de muchos de sus compañeros de generación (Fuentes, Ribeyro, García Márquez...), e incluso de sus maestros (Onetti, Cortázar, Hemingway), fueron fecundos en el arte del cuento, abundancia gracias a la cual deben parte de su reputación. Pero, ¿a qué se debe ese abandono tan prolongado del cuento por parte de un portentoso novelista? ¿Cuál puede ser la razón que ha privado a los lectores de disfrutar de un Vargas Llosa trabajando la intensa concisión del relato? Hace unos meses, el propio escritor confesó que su inhibición estaba motivada