Sonetos a la música (3)
MOZART ¿A qué angélico mirador te asomas? ¿En qué celeste almena tu exacto arco ensarta su ancla en el errante barco, crea un vergel de la nada y la aroma? No bastó el sublime sueño que domas y apuraron la luz tus ojos zarcos. Diluviando arpegios, el mundo parco se anegó en tus aguas, soltó palomas. En su margen, el silencio saciado se yergue a coronar tu aura y anhela fundirse en tu infinito enamorado. Albo Hacedor, la Belleza te vela y encauza el venero que tú has colmado hacia la pleamar que a tu son riela.